Este proyecto presenta como particularidad un estanque ubicado al ingreso del edificio de 34 metros de largo que se armó con nenúfares tropicales, lotos, camalotes y thalias nativas. Debido a la poca profundidad que presentaba el espejo de agua a intervenir se armaron fitofiltros con plantas palustres a fin de mantener y conservar el equilibrio biológico del estanque. Fue acompañado con una gran masa de hemerocallis lemon dando un marco florido al espejo de agua.